Cambié el rumbo de mis estudios, que hasta entonces había sido administración y finanzas, nada que ver con esto.
El porqué de ese cambio fue que viviendo con mi hermana, vi que quería saber más cosas sobre los bebés y niños, sobre su desarrollo, cómo poder cuidarlos mejor y educarlos a la vez. No basta sólo con darles de comer, cambiar su pañal y darles unos pocos mimos.
Investigué sobre las asignaturas o módulos que tenía este grado, lo que se daba en cada uno de ellos y encajó con lo que estaba buscando.
En el momento de empezar el curso no sabía si los conocimientos que adquiriese los usaría de manera profesional o sólo en el ámbito familiar o de amistad, pero a medida que pasa el tiempo y vamos haciendo visitas a centros de Educación Infantil, va cogiendo más forma en mi cabeza la idea de dedicarme profesionalmente a esto en un futuro.
Además, trabajar con niños desarrolla capacidades que se pueden usar en muchos ámbitos de la vida cotidiana, como la paciencia, la organización de tiempo y recursos o la creatividad.
Así que aquí dejo una foto y un video del desencadenante de este cambio en mi vida: Daniela.
